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La tendencia al calentamiento global continuó en 2022, que fue el sexto año más cálido registrado, según un informe reciente de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica. Pero un tuit viral, que utiliza solo un pequeño segmento de un gráfico de NOAA, afirmó erróneamente que la agencia había anunciado una tendencia de “enfriamiento global”.
Historia completa
El 2022 fue el sexto año más cálido del que se tenga registro, según informó la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) el 12 de enero.
NOAA publicó los puntos principales de su más reciente informe anual del clima global, que muestra que la temperatura promedio de la superficie terrestre y oceánica del planeta fue 1,55 grados Fahrenheit (0,86 °C) más alta en el 2022 que el promedio del siglo XX, que fue de 57 °F (13,9 °C). Este aumento en la temperatura es parte de una tendencia al alza que se remonta hace décadas.
Pero Steve Milloy, directivo de un centro de estudios que publica contenido que niega la existencia del cambio climático, dijo que “NOAA hace oficial”que los “últimos 8 años” de estadísticas sobre temperatura muestran una tendencia de “enfriamiento global”.
Eso es incorrecto. NOAA dijo exactamente lo contrario.
“El planeta continuó su tendencia al calentamiento en 2022”, señaló el comunicado de prensa de la agencia, “y el año pasado calificó como el sexto año más cálido desde 1880”.
Pero Milloy distorsionó el hallazgo de la agencia al copiar y compartir solo una pequeña porción de uno de los gráficos incluidos en el comunicado.
En un tuit que atrajo más de 13 millones de visualizaciones, Milloy compartió una imagen que muestra solo el fragmento final de un gráfico de barra bastante mayor, distorsionando lo que mostraba el gráfico en su totalidad. Milloy incluyó solamente los últimos ocho años del gráfico de barras que, en su totalidad, mostraba cómo se comparan las temperaturas globales con el promedio del siglo XX durante los últimos 47 años (ver gráfico).
En el reporte completo, NOAA incluyó otro gráfico que muestra los mismos datos, pero se remonta más atrás: 143 años, hasta 1880, cuando comenzaron los registros. Ese gráfico muestra un cambio aún más drástico.
“Los 10 años más cálidos en los 143 años de registros han ocurrido desde 2010, y los últimos nueve años (2014–2022) son los nueve años más cálidos en los registros”, señala el reporte.
Pero, como dijimos, Milloy asegura que estos datos de NOAA muestran que el “calentamiento por CO₂ es un invento” al mostrar datos que corresponden solo a los últimos ocho años.
Comprender las fluctuaciones del clima
“No puedo creer que este viejo embuste haya vuelto”, Gabriel Vecchi, profesor de geociencias en la Universidad de Princeton y director del Instituto Medioambiental de High Meadows, dijo a FactCheck.org en un correo electrónico.
“Se prevén periodos de varios años de cambios de temperatura planos (o ligeramente negativos) en un planeta que se calienta”, dijo, citando un estudio del 2016 que explicaba una desaceleración del calentamiento a comienzos de la década del 2000.
Vecchi subrayó algunos de los hallazgos del reporte completo de NOAA, incluyendo:
- Cada año desde 2015 ha sido más cálido que cualquier año entre 1880 y 2014.
- Cada año en lo que va de siglo XXI ha sido más caluroso que cada año entre 1880 y 2000 (excepto 1998, que incluyó una corriente del Niño severa. Más sobre ese tema más adelante).
- Tal como el gráfico muestra, cada año desde 1977 ha sido más cálido que el promedio del siglo XX.
“El planeta se ha calentado y está [más] cálido”, dijo, señalando que el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPPC, por sus siglas en inglés) ha encontrado repetidamente que la literatura revisada por expertos sobre ciencia climática indica que “uno no puede explicar el calentamiento durante el siglo pasado en la ausencia de incrementos inducidos por humanos en los gases causantes del efecto invernadero en la atmósfera (CO₂, metano, etc.)”.
Mostrar solo los últimos ocho años de cambio de temperatura es, dijo Vecchi, “en el mejor de los casos, irrelevante para evaluar la realidad del calentamiento global”.
Pero, dijo, “creo que el tuit en realidad confunde y engaña”. Mostrar solo los últimos ocho años para sugerir que el calentamiento se ha desacelerado o revertido no toma en cuenta cómo funciona el sistema climático, explicó. Por ejemplo, saca de contexto el impacto de fenómenos como El Niño y La Niña, patrones climáticos que se desarrollan en el Océano Pacífico cada dos a siete años y que afectan el clima global.
“Está bien establecido que las fluctuaciones en el sistema climático, eventos tales como El Niño y La Niña, pueden causar periodos temporales de calentamiento y enfriamiento de la superficie (respectivamente), debido a la redistribución de aguas oceánicas cálidas en los trópicos y sus impactos en la atmósfera y las nubes”, dijo Vecchi, citando un estudio del 2009 que eliminó los efectos de eventos como El Niño y erupciones volcánicas de los registros de temperatura y halló “un patrón de calentamiento global casi monótono desde ∼1950”.
Entonces, dijo Vecchi, “esperamos que a medida que el planeta se calienta en respuesta al incremento de los gases del efecto invernadero, debe haber periodos de años en los que el calentamiento parece acelerarse y otros en los que parece desacelerarse, y si uno escoge precisamente esos años, uno puede hallar periodos en los que hay tendencias nominalmente negativas temporales”.
Eso parece ser el caso para los ocho años que Milloy seleccionó. Un episodio de El Niño en 2015 y 2016 resultó en calentamiento de la superficie, seguido de La Niña desde 2020 hasta 2022, que provocó un enfriamiento de la superficie.
“El papel del Pacífico en la conducción de oscilaciones en varias décadas de las temperaturas globales se entiende bien ahora”, dijo Vecchi. “Si una corriente del Niño grande precede a una secuencia de eventos de La Niña, entonces uno puede esperar ver una tasa reducida (y potencialmente ausente) de calentamiento global durante ese periodo”.
Por lo tanto, presentar solo los últimos ocho años de datos climáticos fuera del contexto de la tendencia de más largo plazo, y sin explicar el lapso de tiempo incluido, primero, un periodo de calentamiento debido a El Niño y luego un periodo de enfriamiento debido a La Niña, es engañoso.
Traducido por Luis Alonso Lugo.
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